Polansky y dos actores en un teatro.
ESPECTADOR: Polansky es un enfermo; los dos actores, también.
Masoch, el autor del original, otro enfermo. Masoquismo viene de Masoch, tienen que saberlo, si quieren proteger a sus seres queridos.
Estamos ante enfermos que no sólo nos cuentan sus perversiones -hacerse atar, azotar y humillar por una mujer, ser su esclavo, aceptar un tercer amante (si es griego y guapo, mejor), travestismo, homosexualidad latente, (no hay zoofilia porque no hay oportunidad) - sino que además disfrutan haciéndolo.
O tempora, o mores!!! ¡Qué desvergüenza! Deberíamos meterlos en la cárcel y tirar la llave bien lejos.
ESPECTADOR (aparte y en voz baja): Polansky es un enfermo. Y que lo sea... me gusta.
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